La industria cosmética lidera cinco iniciativas de belleza sostenible orientadas a disminuir el impacto ambiental. Hoy los sectores de cuidado personal y del hogar son corresponsables del 18% de las emisiones de CO2 que genera la industria química a nivel mundial. Y son responsables de producir unos 120,000 millones de envases cada año. De ahí que su papel sea relevante.
Actualmente el sector químico es el mayor consumidor industrial de energía, de acuerdo con la International Energy Agency (IEA). Y también es el tercer subsector industrial en términos de emisiones directas de CO2. La razón fundamental es que cerca de la mitad del combustible que demanda lo utiliza como materia prima y no como fuente de energía.
En suma, la industria química es responsable del 18% de las emisiones industriales de CO2 a nivel mundial. Si la industria de cuidado personal y del hogar representa 5% de la industria química global, su papel en la reducción de emisiones es fundamental.
Los sectores de cuidado personal y cuidado del hogar se caracterizan por el uso intensivo de agua y la liberación de productos químicos al medio ambiente. Esto sucede tanto en la producción como en el uso final de los productos. Además, cada año fabrica una gran cantidad de envases de un sólo uso que llegan a los vertederos.
Es importante destacar que las industrias de cuidado personal y cuidado del hogar han recibido mayor atención en los últimos años debido a su impacto ambiental. Un hecho que las ha llevado a un mayor enfoque en la innovación y en la adopción de prácticas afines con la belleza sostenible.
Sin duda, las marcas del sector han entendido que para reducir el impacto ambiental de sus operaciones es necesario actuar en conjunto, en lugar de emprender esfuerzos individuales. A eso se debe que en los últimos años se hayan establecido iniciativas globales que agrupan a empresas del sector químico.
En este sentido, un ejemplo es la Renewable Carbon Initiative (RCI) para la ‘desfosilización’ o ‘descarbonización’ de la industria química. Otro esfuerzo es la plataforma Zero100 que busca transitar hacia cadenas de suministro 100% digitales y cero emisiones.
También puede mencionarse la iniciativa Low-Carbon Emitting Technologies (LCET) del Foro Económico Mundial. El propósito de esta es que la industria química adopte tecnologías que ayuden a reducir las emisiones contaminantes.
Pero el sector de cuidado personal y del hogar tiene sus propias iniciativas. Entre ellas se encuentra la International Collaboration on Cosmetics Safety (ICCS), cuyo objetivo es impulsar la ciencia cosmética libre de pruebas en animales. La Commit for Our Planet, por su parte, está encaminada a reducir la huella medioambiental de la industria cosmética europea.
Tomando en cuenta el alcance y la capacidad de convocatoria, a continuación se destacan cinco iniciativas de belleza sostenible lideradas por las industrias de cosméticos, cuidado personal y cuidado del hogar.
EcoBeautyScore Consortium
El EcoBeautyScore Consortium se lanzó en febrero de 2022. Tiene como objetivo desarrollar un método de evaluación del impacto ambiental y un sistema de puntuación para productos cosméticos y de cuidado personal.
La iniciativa comenzó con 36 empresas y asociaciones de cuatro continentes. Está abierta a la adhesión de más compañías del sector sin importar su tamaño ni recursos.
El consorcio trabaja en cuatro pilares:
1 Establecer un método para medir el impacto ambiental de la industria cosmética y sus productos. 2 Crear una base de datos del impacto ambiental de los ingredientes y materias primas utilizadas en fórmulas y envases. 3 Establecer un sistema de puntuación armonizado para ayudar al consumidor a comparar productos de una manera sencilla. 4 Crear una herramienta para que cada marca pueda calcular el impacto ambiental de los productos individuales.
Este año se planea tener el primer prototipo del método de evaluación, que incluye la puntuación ambiental para diferentes categorías. Asimismo, se avanzará en la alimentación de la base de datos y la creación de la herramienta para el cálculo del impacto ambiental de productos.
B Corp Beauty Coalition
En enero de 2022 se puso en marcha la B Corp Beauty Coalition impulsada por 27 marcas. A principios de este año ya contaba con 62 empresas miembro en cinco continentes. Su meta es mejorar los estándares de sostenibilidad en la industria de la belleza.
Todas las empresas están certificadas por B Corp, único estándar global que evalúa el desempeño social y ambiental, de transparencia pública y buen gobierno de las compañías. Mide el impacto de las empresas en sus trabajadores, la comunidad, el medio ambiente, los clientes y la gobernanza.
La coalición busca facilitar la decisión de compra de los consumidores de productos de belleza. Además de que asuman su responsabilidad en la protección de la naturaleza, es decir, en adoptar prácticas a favor de una belleza más sostenible.
En el primer trimestre de 2023, la B Corp Beauty Coalition lanzó una herramienta de navegación para las empresas y los consumidores. La finalidad es ofrecer información sobre ingredientes, envases responsables y logística ecológica. Es de libre acceso y de código abierto. El siguiente paso de la coalición se centrará en promover la innovación.
Pact Collective (PACT)
El Pact Collective (PACT) es una iniciativa global para combatir un problema ambiental generado por el sector. Esto es, cada año se producen alrededor de 120,000 millones de envases, la mayoría fabricados con plástico, y cerca de 90% no se recicla.
La misión de PACT es recolectar los envases de productos de belleza difíciles de reciclar. Se incluyen envases de plástico más pequeños que un vaso de yogur, tubos comprimibles, frascos de fragancias, bombas y tapas. También otros formatos comunes que no se reciclan en los sistemas convencionales. De esta manera los desvía de los vertederos y se les da un nuevo uso.
El colectivo también se centra en la educación, trabajando para abordar la desinformación y el greenwashing. Así crea una mayor circularidad en la industria. Busca involucrar a diseñadores de envases, marcas, legisladores y consumidores para crear envases más sostenibles y una industria más circular.
Los miembros de PACT cuentan con programas de recolección de envases en sus tiendas. También se hace recolección por correo y cuenta con guías para hacer la limpieza de los mismos antes de enviarlos a reciclaje.
Together for Sustainability
Together for Sustainability (TfS) es una iniciativa de la industria química para establecer cadenas de suministro de productos químicos sostenibles. Sus miembros son empresas del sector que en conjunto facturan alrededor de 600,000 millones de euros anuales. Asimismo, tienen un gasto global de más de 400,000 millones de euros en la industria química.
TfS evalúa a los proveedores de la industria según los principios de Responsabilidad Social Corporativa (RSC). Es decir, en temas sociales, ambientales y prácticas de gobernanza. Proporciona a sus afiliados la infraestructura para realizar evaluaciones y auditorías. De esta manera garantizan la seguridad del suministro, la mejora de la reputación y la reducción de riesgos normativos.
Cuenta con Planes de Acción Correctiva (CAP’s) para mejorar el desempeño ambiental. Para ello se apoya en EcoVadis y auditores de SGS, Intertek, DQS y ERM. Además, creó una guía para el cálculo de la huella de carbono de los productos para la industria química y de las emisiones de alcance 3.1.
Business Coalition for a Global Plastics Treaty
Las empresas agrupadas en la Business Coalition for a Global Plastics Treaty están comprometidas en apoyar un tratado de la ONU legalmente vinculante para poner fin a la contaminación plástica.
En marzo de 2022, en la Asamblea de la ONU se acordó el inicio del proceso para establecer un tratado que reduzca la producción y el uso de plásticos con un enfoque de economía circular. Asimismo, el aumento de la circulación de todos los plásticos necesarios; y la prevención y solución de fugas de macro y microplásticos al medio ambiente.
La Business Coalition for a Global Plastics Treaty hará recomendaciones políticas e informará sobre los beneficios y la necesidad de un tratado vinculante. Este último establecerá objetivos, reglas y obligaciones comunes para ser implementadas en los países. El Comité Internacional de Negociación que elaborará el tratado prevé que esté listo para 2024.
Esta iniciativa es apoyada por la Fundación Ellen MacArthur, que desde 2018 impulsó el Compromiso Global por la Nueva Economía del Plástico. El Compromiso ha sido firmado hasta ahora por más de 500 organizaciones, empresas y gobiernos.