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En la industria de la belleza, uno de los principales enemigos a vencer es el envejecimiento, y al parecer la investigación sobre la autofagia celular podría ser la clave de la eterna juventud.
La autofagia es el proceso de autodegradación y reciclaje de los componentes de las células, y es clave para la renovación celular, la prevención de enfermedades como el cáncer, y sobre todo del envejecimiento.
El descubrimiento sobre la autofagia celular se le atribuye a Christian de Duve, en 1955, pero fue con las investigaciones del japonés Yoshinori Ohsumi en los años 90, cuando se conocieron los mecanismos de la autofagia, lo que le valió ser reconocido con el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 2016.
Durante el envejecimiento la regeneración del tejido muscular disminuye y se acelera el deterioro de las células madre encargadas de reparar el músculo dañado o enfermo, y esto se debe a que las células entran en un estado de senescencia (envejecimiento) irreversible. La autofagia permite mantener la función de las células madre musculares y evitar que envejezcan.
Un artículo de Kim Doyee y otros académicos de Yonsei University, de Corea del Sur, relacionado con las aplicaciones de la autofagia, explica que a partir de lo que ahora se sabe de este proceso celular, Nu Skin desarrolló ageLOC R2, un suplemento dietético en cápsulas que activa la purificación y producción celular en todo el cuerpo, no sólo en la piel, para revertir el proceso de envejecimiento y recuperar la función celular.
La autofagia también participa en la despigmentación de las células de melanoma; y Amorepacific, a través de su marca Laneige, creó el sérum White Plus Renew Original Essence basada en este proceso.
“Se espera que una mejor comprensión de la autofagia ayude naturalmente a las industrias comerciales a tener opciones más amplias de enfoques que puedan adoptar, a fin de satisfacer las necesidades de sus consumidores actuales y futuros”, dicen los académicos, aunque advierten que hace falta más investigación en este campo.
