Al eliminar en su totalidad el uso de combustibles fósiles, la planta mexicana de aerosoles de Unilever se convierte en la primera en América Latina en lograr cero emisiones contaminantes.
Para conseguir esta meta la planta cuenta ahora con un sistema de captación de energía solar. Antes la planta se abastecía de gas natural para sus procesos de producción, lo que generaba más de 330 toneladas de CO2 al año. Con este logro, Unilever se acerca más a su objetivo de cero emisiones en todas sus operaciones a nivel global en 2030.
“En Unilever tenemos claro que la sustentabilidad es el camino correcto y este gran proyecto es un ejemplo de ello, el cual representa el enorme trabajo de todo el equipo y marca un hito en la forma en la que desarrollamos nuestros productos, además de acercarnos un paso más a nuestro propósito de hacer de la sustentabilidad algo cotidiano”, comentó Gustavo Sánchez, vicepresidente de Supply Chain para Unilever Norte de Latinoamérica.
Unilever tiene nueva directora para México
La reducción del uso de combustibles fósiles, se suma a otra meta conseguida en 2018, con la obtención de toda la energía eléctrica de fuentes renovables. Asimismo, en 2014 se consiguió el objetivo de cero residuos enviados a relleno sanitario.
Todas las plantas de manufactura de Unilever en México tienen la certificación World Class Manufacturing (WCM). Gracias a esto, se cuenta con un modelo de mejora continua que permite identificar problemas y buscar soluciones en materia de sustentabilidad y productividad.
Otras metas logradas es la reducción de 96% de residuos por tonelada de producción; la disminución del 75% de las emisiones de CO2 provenientes de la energía, y la reducción del 49% de uso de agua en sus procesos de producción.
La planta ubicada en Morelos es una de las más importantes de la compañía en América. Fabrica desodorantes de las marcas Rexona, Axe, Dove, Savilé y eGo, y sanitizantes de Zest y Cif. Su producción bastece al mercado nacional y exporta a Centroamérica, Caribe, Norteamérica y Europa.